jueves, 29 de diciembre de 2011

LA HORA QUE LLEGA

Por V.




"El que escala altos montes, se ríe de todas las tragedias de la escena y de la vida" Nietszche Asi hablaba Zaratustra.

Y como hay que esperar la hora para dar la bienvenida a un nuevo año y como a la gente le gusta comentar sobre sus logros del año que acaba y de paso sus propósitos para el año nuevo, y existen miles de historias en medio de todo y ningún silencio se cierne y algo peor es quedarse sin decir nada, entonces hay que mostrarse impaciente porque corra el reloj para sumar otro año a la cuenta. Al fin llega la hora y hay alegría y tristeza y el deseo no se sabe si queda atrás ó apenas llega.

Detesto sin embargo cuando la gente comienza a creer en predicciones sobre el futuro, en sueños proféticos y en poderes que no tienen, en los mismos rituales de doce uvas, de monedas, de maletas, de ropa interior, de cosas que solo sus mentes convencidas acogen como importantes, fuera de eso es un absurdo total. Miro al cielo y entre el humo de la pólvora y el grito unánime de las celebraciones doy gracias por entender las cosas que hacen la diferencia.

Siento las ganas de ir a decirles que hay que administrar esa felicidad, ese tiempo, permanecieron todo el año tristes y ahora se alegran solo por ese día, por ese momento, pero amanece y vuelven a su tristeza, trato de insistir en que cualquier momento es ideal para abrazarse, para desearse felicidad, para sentirse bien, no hay que esperar un año para esa ocasión.