viernes, 14 de febrero de 2014

Ayer me encontré tarde

Por XervanteX

Sabía esperar así sin modales,
y al fin no preguntar ni dudar,
para qué sufrir por lo ajeno,
lo que se desea es prohibido.

A lo mejor la luna sea mía,
aunque a ti te la regalé un día,
lo prohibido es lo más deseado,
lo ajeno lo más preferido.

Extraño tu perfume en mi,
tu cuerpo a lado mío,
nuestro sueño intacto
pero los corazones vacíos.

Nos mentimos sin querer,
saber cuánto nos quisimos,
y al final todo fue en vano,
desperdiciamos besos...

Pero jamás amor eso
sí lo merecimos... tarde.