martes, 4 de marzo de 2014

Posesión y Perversión

Por Dilyan Escobar

Queremos tener a alguien (posesión) dominado, comiendo en la palma de nuestras manos, extorsionado, limitado, obediente, que nos secunde las ansias, que los demás se den cuenta el poder que tenemos de manipular, y orgullosos poder decir que mandamos y hacemos lo que queremos.

Nos imponemos con razón o sin ella (perversión), creemos hacer bien las cosas cuando en realidad no es así, miramos por encima del hombro a los otros, envidiamos sus éxitos, celebramos sus fracasos, nos creemos únicos e irrepetibles, odiamos porque si y con la misma lengua pecamos.