miércoles, 17 de septiembre de 2014

Corolario al amor animal

Por Sahid Yepes

El amor humano es interesado.

El amor animal quizá también pero se estrecha en el seguimiento del instinto, la perpetuidad del amor amor en el animal descansa en el sentido de la conservación de la especie, mientras el amor humano pervierte la sensación, compra y vende.

El amor animal tiene ese sentido de estar a lado, sin condiciones, sin el sarcasmo de la posesión, no es egoísta, es fiel hasta donde la naturaleza lo hace posible, no miente.
El amor humano es pretencioso.
El amor animal es consagrado, entregado, se brinda sin esperar, se ofrece de una manera plena.