Por María Alejandra Erazo Vega
Oscuros son tus pensamientos,
más oscuro tu rostro poseído,
y tu silencio que me aparta,
que me calla.
En una mirada tu recuerdo,
tu voz, tu acento,
te extraño todo el tiempo,
y cuando no apareces
me matas.
Insolencia mía pensar
que te ha pasado algo,
si la verdad es otra.