EL GIGOLÓ DE LOS DIOSES
Nadie
sabe de dónde vino, nadie sabe a dónde fue, solo nos quedan sus poemas que ojalá
alguien los haga públicos porque los pobres también tenemos ganas de hacernos
ricos y los ignorantes queremos saber más, hoy me pregunto por qué mueren los
niños y me respondo de igual manera porque cometen la misma osadía de los
adultos: tratar de vivir. Rindo homenaje al poeta más joven del Nadaísmo porque
todos algún día fuimos niños, y algún día nos vamos a morir pero pocos hemos
sido poetas, y dioses, menos gigolós.