LA OBSESION por verse delgada, por lucir una figura estilizada y de acuerdo a los prototipos de la moda ó en el peor de los casos por corresponder con un deseo ajeno.
Los llamados trastornos alimentarios están cobrando víctimas, preocupa el hecho de que sean enfermedades calladas, de díficil aceptación para quien las sufre y que su tratamiento se dificulta por sus sucesivas recaídas.
La anorexia se caracteriza por dietas exageradas a tal punto de que la persona pierde rápidamente peso y su figura se torna delgada, la persona asimila que aún no está lo suficientemente delgada para ser normal. Esta clase de patología tiene que ser atendida generalmente con terapia psicologíca y nutricional, ya que los casos suelen llegar a una desnutrición crónica por lo que es necesario reparar el daño físico antes de comenzar el tratamiento psicológico. Las terapias consisten en identificar los factores que predisponen a la persona y que desencadenan está situación.
Por su parte la bulimia se cararcteriza por dietas menores seguidas de la ingestión exagerada de alimentos y una posterior provocación de vómito ó la utilización de laxantes, la persona se siente insegura y lejos de lograr una figura corporal adecuada. Esta enfermedad se acompaña de períodos de ansiedad y enojo,la terapia psicológica aplicada versa sobre el manejo de la autoestima y fortalecimiento de la voluntad.
Estas dos enfermedades cumplen un ciclo por lo que su diagnóstico temprano es importante para lograr bloquear los efectos colaterales que muchas veces se derivan a problemas mucho más complejos.