En la sociedad hay personas llenas de odio e ira, que a toda costa buscan descargar su furia en alguna persona, instancia y ante cualquier situación explotan y lastiman y causan daño a alguien, o son ellos mismos son las víctimas de su propio proceder.
Es la trama del film conocido como "El club de la pelea" protagonizado por Edward Norton y Brad Pitt. Jack (Edward) es una persona pasiva, prevenida, cerrada en sus principios y complejos, acierta en conocer a Tyler(Brad) quien es la parte contraria de Jack. Estos dos personajes crean un desfogue a la ira reprimida basada en peleas callejeras, entre más golpes se reciban más se ahonda el sentido de heroísmo y orgullo al exhibir las heridas de la pelea.
Jack es el prototipo de empleado que esclavizado por su trabajo decide un día amotinarse y chantajear a su Patrono. Se inserta luego en grupos de apoyo a pacientes terminales y reprime todo sus ganas de hacer algo con su vida, conoce a Marla una chica aficionada a asistir a los grupos de ayuda para gente desahuciada que al igual que él converge en un mundo de caos y serenidad continúa. Por su parte Tyler es líder, organiza el club, recluta adeptos, fornica, habla como piensa y no se está quieto un instante.
El final encierra un nuevo despertar, una insurrección, una rebeldía yuxtapuesta a todo, la esquizofénia de Jack que al fin se da cuenta que Tyler es solo proyección de su ego, su delirio, su fantásia, la causa de su insomnio, su alucinación y es necesario neutralizar este eco. Pero es tarde. Somos lo que somos, así el mundo para cada cual parezca distinto es uno solo y a veces todo se derrumba ante nuestros ojos como un castillo de naipes que da lugar a una nueva realidad original o inventada pero conveniente para todos.