El inconveniente de tener tanto espacio y tan poco tiempo, la vida a lo mejor sirve para ese propósito: recorrer la tierra conociéndose uno mismo.
La treta fundamental del vicio de respirar,de ser el observador sin la consciencia critica y sin pretensión. Tanta realidad para un solo cerebro y la particularidad de los cinco sentidos todos influenciados por las divergencias.
La vida y el logro de la felicidad que no dejan huella próxima y que se plantean como una línea llena de pretextos, de excusas, de obstáculos premeditados, porque los problemas surgen de aquellas situaciones no resueltas. Las pequeñas y sencillas cosas de la vida que poco duran, y el sufrimiento que dilata el tiempo. La presunción que la felicidad es muy corta y todo destino muy prometedor.
La energía con que arranca la vida y la vejez que le matiza con su debilidad, la misma sensación que parece ir dando el mundo a todo ser para acostumbrarse a que hay que alguna vez partir.