lunes, 23 de enero de 2012

¿ME VENDES UN BESO?

Por: Yatmuzi
La resistencia intelectual pacífista



Vocifera aburrida la chica de la calle, mostrando piernas sueltas, un escote libre e insinuando que más allá de la poquita ropita y hueso hay algo más, sabe cuidarse ya que en una hermética cartera lleva su cuchillo, los anticonceptivos y un enjuague bucal, además del elemental espejito, un cambio de ropa interior, una toalla higiénica, un pintalabios, un rubor, una gama de tinturas para camuflar sus ojeras y una serie de papelitos con números de teléfonos de sus clientes y por su puesto el peine y las gafas. Así estaba la chica allí parada distrayéndose al amparo del sol cuando un chiquillo viene y ella provocadora le dice "¡vamos!" pero el insurrecto es muy incauto y se asusta y se ve no sabe ni a dónde el va, pero para no parecer tan virginal se anima a decirle a la supuesta -cuánto cuesta un beso- la chica se ríe por la ocurrencia y se le antoja decirle "prueba no más" pero en su lugar le dice "por allí empiezas y quieres más". El chiquillo se aventura revisa sus bolsillos y extrae un billetico todo arrugadito que dice que era para comprar el pan, atrevida ella le dice "es lo mismo pan y pan" pero de cierta forma con ese billetito solo le podrá dar un beso, y sin previo aviso le atrapa por el cuello y le deja sin aliento además del color de sus labios tatuados ante el desconcierto del chaval que se va dispuesto a levantarse de alguna forma la plata para seguir con lo demás... el cuerpo y el alma.