Por V.
"No llegar también es el cumplimiento de un destino"
Gonzalo Arango
No sé si algún día podamos acordarnos, el tiempo es implacable y los recuerdos solo son anhelos que se escapan sin alimentar esperanza alguna, es el triunfo del vacio sobre lo que pudo ser y no fue; todo lo demás se nos va en deseo. Y ni siquiera somos el tiempo presente sino que cuando pensamos estamos prefiriendo futuro, vamos por el mundo construyendo un mundo de fantasía con ladrillos, con fuerzas minímas que ante la naturaleza son nimias. No hay que postergar la vida, no hay que planear tanto el porvenir, desear lo conveniente y estar al corriente del fin inmediato vale tanto y si el tiempo es oro hay que saberlo administrar. Aplazamos tantas cosas que cuando vamos a morir lamentamos no tener ni oportunidad para dar rienda suelta a nuestros deseos. Precisar que hay que avanzar y no detenerse para contemplar es una misión que todos tenemos y que muy pocos alcanzarán.