domingo, 5 de agosto de 2012

ENVIDIAS






Dicen que la envidia es mejor despertarla que sentirla; considero que donde licíte toda clase de orgullo hay recelo, la gente de éxito dice que no tiene tiempo para mirar lo que hacen otros sin embargo lo que hacen y en lo que se ocupan suele estar relacionado a persuadir ser parte de ese conglomerado que son los demás. Bien lo expresaría Jean Paul Sartre en su emblemática obra sobre el ser y la nada: el infierno son los demás. A raíz de que la Psicología junto con la Psiquiatría postularon a pacientes con un notable perfil criminal se coloco de manifiesto que dicho perfil podría ser hereditario, toda esta investigación a raíz de los múltiples atentados en las Preparatorias de los E.E.U.U. realizados por alumnos en contra de sus propios compañeros y Profesores. Hay sin embargo condiciones patológicas en que el individuo se enfrasca en un estado cerrazónico respecto a otro individuo o grupo de individuos y comienza a operar un estado de presión tal que puede desencadenarse un ataque directo. Habitualmente es indispensable pensar en lo importante que es tener simplemente lo necesario e indispensable en la vida, tampoco eso de aglomerar riquezas, amistades e ilusiones es muy bueno, hay que saber perder y perderse.