Comité Experimental
La juventud de hoy está más confiada, más rebelde, más sometida por los medios de comunicación y apalancada por hábitos destructivos... money, money, money. ¿Qué hacer? ya planteamos ciertas soluciones: replantear el sistema educativo a nivel del hogar y los centros de formación; inyección de valores y exploración de fortalezas en lo artístico; el direccionamiento de los medios de comunicación y avance en la tecnología; la moderación en la producción de licores, cigarrillos, medicamentos legales controlados; y ante todo el reconocimiento de las libertades individuales.
Los que hemos nacido antes no podemos confinar a los que han nacido después, no podemos preciarnos de ser más, ni mejores, lo que pasa es que por el tiempo estamos mejor adaptados.
El papel de la política y la religión como emblema de autoridad, disciplina, y sumisión es positivo, coincidimos en la existencia de leyes y perfiles éticos y morales, pero al parecer debatimos el papel en el que el individuo es sosegado, apagado y su manera estricta de existir es: nacer, crecer, reproducirse y morir, y en cada nivel el ser espera trascender hacia la promesa religiosa de resucitar y nacer de nuevo.
No podemos por eso permitirnos caer en la tentación, hoy del comercio; si miras el cuerpo humano es un mercado, para el cabello te venden champú, para la cara maquillaje para las damas; espuma de afeitar para caballeros, te imaginarás el resto ¿verdad?.