Comité Experimental
El Rey siempre será Elvis Presley.
En esos minutos previos al decenso, a el riesgo, a la tensión, a la decisión absoluta le aplicó música a la mente de la más redentora, la de un coro que apremia, que dice tantas cosas sobre el amor, sobre la felicidad que hay en todo, Elvis el mago, el rebelde, el que luce su traje blanco de botas y mangas anchas tanto como su espirítu, y en mi auto, en mi oído en todas partes te escucho, pareces eterno. De tí Elvis habló cuando el licor ya no baja por la garganta por el nudo que se siente y entonces rezo tu discografía, y le recomiendo a mi amigo lelo que cuando le digo "viva las vegas" el inútil escribe "viva las vagas".
Por tí Elvis aprendí inglés, e intenté aprender a bailar, me peine hasta donde pude dejandomé un copete, me vestí de negro y saludé con los brazos extendidos, aún no estoy convencido de tu muerte, el mundo te quedó debiendo mucho, pero es lo que vale, dar más de lo que se pide. Repito una y otra vez las películas, los vídeos, los clásicos. Magistral, emotiva, tu voz, tu verso lleno de ambición, de sueño, no sé decir más, sólo que los grandes mueren y su gloria queda intacta.
Elvis señores, ha dejado el edificio.